Seat apuesta todo al eléctrico. O eso nos ha parecido tras el anuncio de su presidente, Luca de Meo, en la reunión anual de cuentas de la firma española. Un evento en el que se ha hablado más de futuro que de presente, ya que la marca ha anunciado que lanzará seis coches eléctricos antes de que acabe 2021 y que además, desarrollará en Martorell una plataforma para eléctricos pequeños.
Los primeros en llegar será el Seat Mii eléctrico, que será una evolución del modelo que hoy podemos ver en las calles, además del el-Born, el primer coche exclusivamente eléctrico de la marca, que ya pudimos conocer en el Salón de Ginebra 2019.

Seat quiere ensamblar en Barcelona los eléctricos “del pueblo”: coches que de entrada, no superen los 20.000 euros. Un nicho de mercado prácticamente desierto, aunque amenazado por los coches que planean aterrizar desde China para agitar el mercado español. Eso sí, Seat cuenta con el valor añadido de tener coches fabricados en Europa.
Una revolución en el catálogo que llega en el mejor momento de la historia de la marca. Jamás había tenido tantos beneficios: 294 millones de euros, con un crecimiento del 4,6% respecto a 2017.
Cuatro híbridos enchufables para electrificar el catálogo
Seat, junto a su marca deportiva Cupra, potenciará la creación de híbridos enchufables. Por un lado, como una de las motorizaciones disponibles para la nueva generación del León y el Tarraco. Por otro, para coches de nueva creación, los Cupra León y Formentor. Este último será fabricado en Martorell.

Esto último, junto al desarrollo de una nueva plataforma en Barcelona, es una gran noticia para la industria española, ya que los grandes grupos de automoción están redistribuyendo sus fábricas para aumentar la rentabilidad de los futuros coches eléctricos.
Que Barcelona esté en la mente de los ejecutivos de Wolfsburgo es buena señal, ya que recientemente anunció que reduciría la plantilla de sus fábricas en Alemania a causa del vehículo eléctrico.