No volveremos a disfrutar del Tourist Trophy Zero de la Isla de Man hasta 2022. Podríamos calificar esta prueba como un gran fracaso de las carreras electrificadas, aunque los promotores no se riden: quieren mejorar la categoría para que en dos años, vuelva con toda la fuerza del mundo.
Los promotores de esta disciplina consideran que se han adelantado a su tiempo. De ahí que quieran que las motos y la tecnología se asienten para hacer del Tourist Trophy Zero una competición repleta de participantes.
Porque por ahora, la categoría cuenta con poco atractivo y no tiene patrocinadores suficientes. De hecho, este año 2019 solo han acabado siete pilotos. Pero no es porque haya ocurrido algo raro. Es algo común desde que nació la competición: en 2018 terminaron seis, en 2017 terminaron ocho y en 2016, cinco.
A través de este parón, equipos, fabricantes y promotores buscarán la fórmula para desarrollar la prueba. Un paso hacia atrás para dar dos hacia delante. Porque la Isla de Man mantiene su objetivo de lograr, a largo plazo, ser un lugar repleto de energías limpias.
De hecho, la energía eléctrica no será, quizá, la única presente en el TT Zero de 2022. Porque la organización no descarta utilizar otras fuentes de alimentación alternativas. ¿Veremos motos de hidrógeno? Toca esperar para verlo.
