Los coches de combustión, tanto gasolina como diésel, pueden estar seguros de que seguirán circulando pese a la irrupción del coche eléctrico y a las amenazas de ser prohibidos que existen en torno a su prohibición.
Así lo ha afirmado la comisaria europea de Industria y Mercado Interior, Elzbieta Bienkowska, que no ve compatible la censura al coche tradicional con la ley comunitaria. Aunque sí ve bien la limitación de acceso a los centros urbanos para mejorar la calidad del aire.
“Una prohibición completa de la comercialización de coches nuevos de gasolina y diésel en un Estado miembro no es compatible con la ley de la UE”, señaló la comisaria en un escrito.
Así ha sido la respuesta realizada por el Parlamento danés, lo que demuestra que hasta los líderes de los países europeos tienen dudas sobre la prohibición (o no) de los coches de combustión en la Unión Europea.
Esto es contrario a las palabras de Pedro Sánchez, entre otros, asegurando que prohibiría los coches de combustión en 2040. Unas palabras consideradas un brindis al sol, pero poco más. Bienkowska lo confirma. “Les invito a una discusión en el Consejo en la cual estaré encantada de participar”.
Pese a ello, aboga por el fin de los motores gasolina y diésel de una forma natural, sin una prohibición. Esto se debe a “razones climáticas, mediambientales y de competitividad”.
